Hace bastante tiempo que quería compartirles esta noticia, pero más vale tarde que nunca, ¿no?. Últimamente, las impresoras 3D están revolucionando el mundo con impresiones tan pequeñas (y peligrosas) como un arma hasta las más complejas como un auto o una prótesis humana. Pero hoy les quiero dejar algunas imágenes del vestido que realizaron para Dita Von Teese, basado en la secuencia matemática de Fibonacci (0, 1, 1, 2, 3, 5, 8...).
El vestido fue fabricado en 17 partes impresas de nylon que fueron ensambladas a mano y a las que se añadieron 12 mil cristales de Swarovski. Fue diseñado por
Michael Schmidt (Los Ángeles) y
Francis Bitonti (New York), que colaboraron a distancia en el modelo, afinando los detalles a través de videoconferencias. Les dejo el vídeo del cómo se hizo. Asombroso, ¿no?